Una vez más os traemos información sobre un animal fetén. Hoy hablamos del Kiwi, ese gran desconocido, porque supongo que vosotros no veréis a mucha gente paseando por el parque a su kiwi con una correa, como mucho los habréis visto en el Zoo o en documentales.
Estos animalillos son originarios de Nueva Zelanda y son aves, pero no pueden volar, lo cual es una gran paradoja, pero se entiende porque sus alitas son tan pequeñas que les es imposible hacer fuerza con ellas. Tienen el tamaño de una gallina, poseen un plumaje fino y la forma del cuerpo es como el kiwi (la fruta) con dos patitas incrustadas en la parte de abajo, una pelotilla que forma la cabeza y un pico alargado, ah y son super-monos.
Para la gente que siga sin tener muy claro como es el kiwi (si es que teneis menos imaginacion que un ladrillo), a ver si la siguiente ilustracion os ayuda un poco:
Ahora que ha quedado claro, seguimos hablando de este animal con nuestro especialista en animales fetenes, el doctor Jim Waters.
“Como otros animales fetenes, hay escasos ejemplares de Kiwis. No sabemos si es debido a que son unos animales muy tímidos y nocturnos y se esconden o si es que son tan adorables que en cuanto un ser humano ve uno lo quiere abrazar y se lo acaba cargando de pura ternura”.
Pero ¿qué comen los kiwis? le preguntamos a nuestro experto.
“Estos animalillos son omnívoros, como nosotros. Pueden comer hierbecilla, lombrices, peces pequeños, phosquitos (si le das la ocasión…)”
“Otra curiosidad de esa especie es que los machos-kiwi son muy responsables, porque son los que empollan los huevos. Las hembras-kiwi mientras se dedican a ver el fútbol y pasarlo bien con las amigotas, de cervezas.”
Para terminar os dejamos con una historia tierna y un tanto lacrimógena de un Kiwi, de cómo cumple su sueño… ¡pero a qué precio!