Ayer iba a hablaros de los procesos creativos, pero llegó el mazazo de la noticia de la muerte de Terry Pratchett y decidí dejarlo mejor para hoy. Precisamente su figura está muy ligada a lo que quería hablar: la importancia de crear, de quitarnos los miedos y desbloqueos y crear, crear y crear. Precisamente Pratchett es un buen ejemplo de la palabra creatividad y prolífico (¡escribió 70 libros!).
Algunos diréis: “a mi me importa un pepino, soy una persona poco creativa…”. Es cierto que hay gente más o menos creativa, pero no os engañéis, todos tenemos creatividad y la usamos ya sea para dar vueltas a las cosas y solucionar problemas de distintas formas, para escribir un email o para escribir en las redes sociales. El problema viene cuando necesitamos la creatividad para “vivir”, ya sea porque nuestra profesión dependa de ello o porque en un par de días tenemos que entregar un trabajo de 50 páginas, es entonces cuando se pueden dar los malditos bloqueos. Estos bloqueos son causados por dos factores: internos y externos.
- Bloqueadores internos: causados por el cansancio, el estrés y ansiedad, o los miedos y trabas que nos ponemos nosotros mismos del tipo “no voy a ser capaz”. Resumiendo: las malditas autolimitaciones.
- Bloqueadores externos: como el timing, las dichosas fechas de entrega que hacen que nuestra creatividad merme, o la gente ceniza que te dice que no se puede.
En este post intentamos daros unos trucos que seguramente ayudarán a que paséis cuanto antes esas fases de bloqueo o del síndrome de la “hoja en blanco”. Todo esto os lo cuento desde mi experiencia personal, ya que he pasado un poco por bloqueos de todo tipo. Espero que la información os sea útil. Allá vamos.